El 62,5% de los niños en Chile recibe algún método violento de disciplina

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    Esta semana se entregaron los resultados de la Tercera Encuesta Longitudinal de Primera Infancia 2017 (ELPI). “Las cifras de violencia son muy preocupantes y nos revelan que también debemos reforzar el rol protector de las familias”, dijo Carol Bown, subsecretaria de la Niñez, quien presentó las reveladoras cifras junto con su par de Evaluación Social, Alejandra Candia, y el representante de Unicef en el país, Paolo Mefalopulos.

    La subsecretaria de Evaluación Social, Alejandra Candia; y la subsecretaria de la Niñez, Carol Bown, junto al representante de Unicef en Chile, Paolo Mefalopulos, entregaron esta mañana los primeros resultados de la Tercera Ronda de la Encuesta Longitudinal de Primera Infancia 2017 (ELPI), aplicada a más de 17 mil niños y niñas de hasta 12 años de edad. El objetivo de esta encuesta longitudinal, que se realiza a partir del 2006, es evaluar y marcar las trayectorias del desarrollo infantil, así como también la caracterización de sus hogares y las personas que los cuidan. 

    Entre los principales resultados, la subsecretaria Alejandra Candia explicó que los niños y niñas del país viven en mayor proporción en hogares pertenecientes al primer y segundo quintil -40% de menores ingresos-, mientras que entre los hogares con jefatura femenina destaca la alta proporción de hogares monoparentales (55,7%).

    En lo relativo a temas de cuidado y disciplina de los niños, también se reveló que el 62,5% de ellos ha sido víctima de algún tipo de maltrato violento, psicológico y/o físico, como método de disciplina por parte de sus cuidadores. Asimismo, sólo un 31,7% de los niños de 5 años o más, recibe exclusivamente métodos de disciplina no violentos.

    Además, el 96,4% de los niños cuenta permanentemente con la supervisión de un adulto, en tanto que el 3,6% queda sin esa supervisión por periodos de tiempo superiores a 1 hora. La encuesta también indicó que en el 95,8% de los casos, el cuidado principal del niño/a corresponde a su madre. En tanto, solo el 1,4% es el papá del niño/a; 2,3% el abuelo o abuela; 0,4% otro familiar; y el 0,1% es un no familiar.

    La subsecretaria de la Niñez, Carol Bown, comentó “tenemos un gran desafío como Gobierno para evitar la normalización de la violencia en los hogares. Debemos instalar que todos los niños, niñas y adolescentes, son sujetos de derecho desde el momento de nacer y como sociedad debemos aprender a respetarlos en todas sus dimensiones. Las cifras de violencia son muy preocupantes y nos revelan que también debemos reforzar el rol protector de las familias, la corresponsabilidad en el cuidado de los niños y niñas y el involucramiento de toda la comunidad”.

    Por su parte, la subsecretaria de Evaluación Social recalcó que “todas las alertas que nos han levantado los resultados de la Tercera Ronda de esta encuesta serán materia de ocupación del recientemente aprobado Ministerio de Desarrollo Social y Familia, el que gracias a su nuevo enfoque nos permitirá no solo preocuparnos de un grupo que merece toda nuestra atención como los son los niños y niñas de nuestro país, sino que también darles las herramientas para que puedan superar su condición de vulnerabilidad”.

    El representante de Unicef en Chile, Paolo Mefalopulos sostuvo que los resultados de esta encuesta “confirman que la violencia es un problema generalizado y culturalmente instalado en Chile. Esto puede estar mostrando que los adultos normalizan el trato violento hacia los niños o desconocen recursos alternativos de crianza. En este contexto, cobra especial relevancia el trabajo que el Gobierno está haciendo para fortalecer a las familias en cuanto a las estrategias de parentalidad, y que desde UNICEF venimos apoyando porque entendemos que es un elemento clave para disminuir la violencia hacia los niños y niñas”.

    La Tercera Ronda de la encuesta fue aplicada a un total de 17.307 niños y niñas entre 0 y 12 años y sus hogares, el levantamiento se llevó a cabo entre noviembre de 2017 y julio de 2018, y estuvo a cargo del Centro de Encuestas y Estudios Longitudinales (CEEL), institución perteneciente a la Pontificia Universidad Católica de Chile que se adjudicó su licitación.

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